¡Buenos días estimados lectores! Hace un par de días que he estado pensando en abrir un par de secciones más en la barra de páginas del blog; una de "Sígueme" donde pondría todos los links para seguir al blog y vendría a ser como el de "contacto" y luego otro apartado mucho más interesante.
Debido a que muchas veces me pongo música para escribir alguna cosilla (normalmente para algún fragmento, si necesito algo que me relaje o me suba un poqutín la adrenalina), además de que con algunas imágenes soy capaz de escribir más allá de esta, pensé en abrir una sección donde quien quiera me puede mandar alguna imagen que este bien detallada, alguna canción con alguna imagen, etcétera, y yo miraría que puedo hacer con esto, pero ya lo detallaré más en el propio apartado, además de explicarlo mejor.
Si, lo sé, me estoy demorando ya en poner el relato, así que ya no tardo más, os dejo la pequeña introducción de siempre y luego el relatillo. Pues bien, esta vez es otro relato breve, que hice en un momentín, escribiendo casi lo que salía de mi mente ipso facto, por lo que se podría decir que es un relato recién salido del horno, ya que solo lo revisé para las faltas de puntuación y poco más.
¡Espero que les guste mis relatos aún calentitos del horno!
La chica agachó la mirada, con una sonrisa tímida. ¿Qué le pasaba? ¿Por qué se comportaba así? Se preguntaba, pues nunca antes había tenido una reacción así
por nadie.
Había cerrado los ojos al bajar la mirada, pero no tardó en abrirlos, solo
un poco, para poder mirar de reojo al causante de dicha reacción. Hacía mucho
que no se reía, hacía tanto que hasta llegó a preguntarse si de verdad era
capaz de sonreír de nuevo, pero él le demostró que sus pensamientos eran
erróneos, solamente con decir una tontería sin sentido.
Se acarició levemente su pelo largo y rubio, algo oscuro, para luego
envolver su dedo índice en una de las puntas, dándole pequeñas vueltas,
nerviosa por la situación.
El muchacho se acercó a ella, se agachó un poco para ponerse a su altura,
pues se encontraba sentada y él en pie, y la miró a los ojos. Ella no pudo aguantar mucho, rápidamente
apartó la mirada.
De nuevo no sabía el por qué, simplemente lo había hecho, vergonzosa. El
joven sonrió ante su reacción, tomándolo como un juego, aunque para ella no lo
fuera, para ella todo esto era algo raro que la abordaba de inmediato.
Otra vez, intentó buscar su mirada pero la muchacha apartó de nuevo la
vista, ruborizándose levemente. Aunque, francamente, no podía evitar mirarlo de
reojo.
Él acarició su suave y fina mejilla. Ella notó que el corazón le daba un
vuelco y se tiró algo atrás. Él se río. Ella hinchó los mofletes, sin saber cómo
reaccionar.
Hacía tiempo que se conocían, pero nunca habían entablado tanta confianza
hasta hacía unos pocos días, donde el chico la ayudó abrazándola cuando ella le
contó su miedo de creer haber perdido la felicidad. Verdaderamente no tenía a
nadie realmente importante a quién decírselo, él tuvo la suerte de encontrarse
cerca en ese momento y ella la suerte de que fuera comprensivo y de jurarle de
que se encargaría de que ese pensamiento no volviera a su cabeza.
Lo había logrado. Ahora su cabeza solo pensaba en él, lo tenía claro. Lo
miró directamente a los ojos, la joven al joven. Él se sorprendió, pero sonrío.
La muchacha se ruborizó un poco más. Él acercó su frente a la de ella, sin
apartar su mirada, y le dijo que siempre estaría allí con ella, para lo que
necesitara. Nunca la dejaría.
Ella, sin saber el cómo ni el porqué, lo besó, cerrando sus ojos marrones
tan lentamente como el roce de sus labios.
¿Y bien? ¿Les gustó? Espero que sí~
Ya saben que pueden votar que les parece, twittearlo, darle un Me gusta de Facebook o enviarlo por allí y todo eso, además de compartir su opinión en comentarios o por e-mail.
¡Un cordial saludo y hasta la próxima!
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